Beneficios de la Natación

Nadar resulta por lo general mejor para el cuerpo que los ejercicios de tierra, dado que la aptitud natural de flotar en el agua ayuda a evadir los inevitables golpes que tienen la posibilidad de ocasionar lesiones.

En el agua, el peso de un individuo es precisamente el 10% de su peso habitual, y el margen de movilidad es bastante más grande, más que nada para la gente que más requieren ponerse en forma y tienen limitada su movilidad dado que el agua soporta el peso de los integrantes.

Entonces, es una aceptable selección para los que desean llevar a cabo ejercicio, y tengan la posibilidad de tener inconvenientes con la costumbre de ejercicios en tierra. Entre otras cosas, nadar puede ser perfecto para embarazadas, para esos que sufren artritis, o para todos los que sufren inconvenientes de espalda y de peso.

Además, la gente con dolencias pulmonares como el asma, al ser el ámbito de una piscina comúnmente muy húmedo, respiran más de fácilmente.

Hay que agregar a todo ello, los provecho para la salud psicológica que genera. Nadar relaja de las tensiones del día a día, decrece el incremento de tono muscular producido por el estrés, crea estados de relajación positivos y ayuda para dejar la mente “en blanco” la cabeza y asilarnos de los inconvenientes.

Otras propiedades de la natación

Nadar se encuentra dentro de los pocos ejercicios físicos que favorecen al cuerpo globalmente dado que capacidad la fuerza, la resistencia y la elasticidad simultáneamente.
Tiene todos los provecho cardiovasculares de correr, a la vez que varios de los provecho musculares del ejercicio de pesas y otros de los efectos potenciadores de la resistencia física vinculados a las clases de danza o aerobic.
La natación usa la mayor parte de los grupos musculares y es un riguroso entrenamiento del cuerpo que asiste para sostener el corazón y los pulmones saludables.
Nadar además asiste para sostener flexibles las articulaciones, fundamentalmente el cuello, los hombros, y la pelvis. Los grupos musculares que especialmente se usan al nadar varían según el movimiento que se escoja.
Al nadar incrementas el nivel de educación física y de esta forma aumentas la proporción de energía que quemas, lo que hace de este deporte un ingrediente perfecto para algún programa de control de peso.
Con en relación a la gente superiores, además de sostener la fuerza física, la natación tiene como provecho la optimización de la sincronización motora y la reducción del compromiso de padecer caídas y roturas de caderas.

Potenciar los resultados positivos de la natación
Pero esos que quieren impulsar totalmente los provecho saludables de la piscina deberían elegir un programa de ejercicios más enérgico.

Si estás comenzando un programa de natación ya que no estás muy en forma, comienza por nadar una longitud cierta y tomándote ahora un descanso de entre 30 y 60 segundos de duración. No te fatigues tratando batir récords de agilidad o resistencia nada más meter el pie en el agua. Tómatelo con tranquilidad.

Luego de algunas semanas puedes aumentar el tiempo que pasas nadando. Cuando hayas creado cierto nivel de manera, puedes adoptar un programa de calentamiento de 5 a 10 minutos, seguido de entre 20 y 40 minutos de natación con diferentes estilos, y terminar con un lapso de cinco minutos de vuelta a la tranquilidad con un nado más retardado y relajado.

Nadar entre 3 y 5 ocasiones por semana te proporcionará una capacidad aeróbica que fortalecerá la salud de tu corazón y pulmones. Por otro lado, este ejercicio no va a tener efecto en la fortaleza de tus huesos. Por esto, es una aceptable iniciativa caminar, correr o llevar a cabo algún otro ejercicio en tierra gracias a la presión que han de aguantar los huesos, prestando asistencia a éstos a sostener o aumentar su masa ósea.